El auge de las plataformas de streaming: En los últimos años, las plataformas de streaming como Netflix han ganado popularidad a pasos agigantados. Gracias a su amplio catálogo y la comodidad de poder ver contenido desde cualquier dispositivo, millones de usuarios han optado por esta opción de entretenimiento. El acceso ilimitado a películas y series, junto con la posibilidad de disfrutarlas en el hogar, ha cambiado la forma en que consumimos contenido audiovisual. El desafío para los cines tradicionales: En contraste, los cines tradicionales se enfrentan a nuevos retos en esta era digital. La competencia de las plataformas de streaming ha llevado a una disminución en la asistencia a las salas de cine, especialmente entre el público más joven. Además, la pandemia del COVID-19 aceleró aún más este proceso, obligando al cierre temporal de muchos cines y fomentando el consumo de contenido en casa. Los cines han tenido que adaptarse y ofrecer experiencias más inmersivas y exclusivas para atraer a los espectadores. El futuro de la industria cinematográfica: El debate entre cines y plataformas de streaming plantea interrogantes sobre el futuro de la industria cinematográfica. Mientras que algunos argumentan que los cines seguirán siendo una experiencia única y especial para disfrutar del séptimo arte, otros creen que el streaming dominará completamente el panorama audiovisual. Es posible que la solución resida en encontrar un equilibrio entre ambas opciones, ofreciendo a los espectadores la libertad de elegir cómo y dónde disfrutar del contenido que aman.